Nos merecemos bellos milagros y ocurrirán


Tras un primer tiempo preocupante, River salió a jugar el segundo tiempo con mucha actitud. Empató el partido ante Atlético Nacional de Medellín y alimentó la ilusión de ser campeón de la Copa TOTAL Sudamericana. El próximo partido será en una semana en el Monumental.

No fue fácil. El primer tiempo le costó mucho y hasta hacía dudar de que se pueda revertir el resultado, pero sin embargo River resurgió y mediante la zurda de Leonardo Pisculichi volvió a alimentar el sueño de quedarse con la Copa, esa que aún le falta en la vitrina. Como en el partido ante Boca, nuevamente Marcelo Barovero y Leonardo Pisculichi se quedaron con toda la atención. El 1 del Millo, volvió a ser clave bajo los tres palos, sobre todo en el primer tiempo; y el ex Argentinos Juniors, con actitud y destellos de buen juego clavó un golazo con su zurda y decretó el empate.

En el primer tiempo las cosas no salieron del todo bien para Marcelo Gallardo y los suyos. Nacional manejaba la pelota y los tiempos del partido, incomodó a Barovero varias veces pero no lograba abrir el marcador. Cuando River empezó a jugar con claridad, abriendo la cancha, llegó la apertura del marcador: a los 34’ con una gran asistencia de Edwin Cardona, Orlando Berrío ingresó por la derecha y remató cruzado para vencer a Barovero.

En el complemento, el conjunto de Núñez salió decidido a buscar la igualdad y porque no la victoria. Se vio un River más agresivo, con más ideas y actitud. Llegó muchas veces al área de Franco Armani pero dejó huecos en la defensa y esto le permitió a los locales contragolpear, aunque sin puntería y suerte ya que el travesaño les negó el segundo gol.

Con Pisculichi a la cabeza, la visita encaraba el partido. Hasta que a los 20’, Piscu sacó un bombazo desde afuera del área y clavó el 1 – 1 que se gritó desde Colombia hasta Argentina. De ahí en más el partido fue de ida y vuelta. Ambos equipos apostaron a buscar la victoria y contaron con las oportunidades de llevarse el encuentro: Ramiro Funes Mori no llegó a cabecear bien un córner, Teo Gutiérrez remató pero la pelota se desvió en un defensor y se perdió por la línea del fondo.

Pitazo final de Ricardo Marques. River alcanzó un gran resultado que le ayudará a llegar con mayor confianza al último partido de la serie, además de saber que definirá en su casa y ante su gente. Queda un solo paso más para el final, para obtener la Copa tan ansiada y los muchachos están a 90’ de quedar en la historia del club. Nos merecemos bellos milagros y ocurrirán.
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