Allí nos topamos con Norberto Alonso, uno de los gladiadores y goleadores del Millo, más ganador de toda la historia. Donde, en aquellas épocas, se jugaba por más que el campo parezca un chiquero. ¡Si, la de Sarandí no estaba tan mal!
El Beto dialogó con Identidad Monumental sobre este River, el River de Gallardo, al que a todos nos gusta hablar. Y como siempre, sincero y sin presiones, opinó de su Millo querido...
-¿Cómo vez el River de hoy? ¿Notás una diferencia futbolística e institucional?
-Si. Total. Desde que se ganaron las elecciones se está construyendo otra vez un club. El River que todos queríamos ver.
-Hoy nos encontramos con un equipo que está disputando una copa internacional, como es la Sudamericana ¿Ves posibilidades de volver a los gloriosos tiempos?
-Lógico. El que dice que no hay posibilidades es que bajó los brazos. River está jugando de una gran manera y todos le tenemos muchisima fe.
-¿Que decís de Gallardo como DT? Un técnico jóven que viene de dirigir en Uruguay y hoy se topa con un club tan grande y tan querido...No es Labruna, ni Didí: es el muñeco. Y la revolución que está arrastrando del pasado. El gran juego que tal vez se parezca, como dijo el Beto, al River de las viejas y gloriosas épocas. ¿Ahora? Ahora queda esperar. Esperar en esta reposera que a todos los hinchas del millo nos gusta estar, disfrutando del gran fútbol y, sin querer queriendo, estando punteros en el campeonato, jugando una Copa Sudamericana, con chances de Copa Argentina y ya soñando con la Libertadores del año que viene.
-Yo no conocía como trabajaba. Le llega muy bien a los jugadores y estos lo interpretan perfectamente. Hoy hay una gran energía positiva que hace que el equipo lo sienta así. En un momento me hace acordar a la época nuestra con el gran maestro Didí y también a la de Ángel (Labruna), donde mezclaban juventud con experiencia.
Parecía lejos volver a ser River. Pero es así, Marcelo sigue y sigue ilusionando. ¿Tenemos que esperar? No hay problema muñeco, así da gusto esperar.
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